EL EFECTO CONTRARIO: BAJA LA INFLACIÓN Y SUBEN LOS PRECIOS
Según algunos expertos, la inflación que se esta produciendo se enfoca en una inflación de la oferta que viene dada por un aumento de los costes de producción que se traslada al precio final del producto. Esto es lo que ha provocado que en el sector de la alimentación los precios se hayan incrementado. El principal motivo es el aumento del precio de la energía aunque la guerra de Ucrania también ha jugado un papel fundamental ya que ha impedido la importación de alimentos, materias primas u otros productos que procedían de los países combatientes en la guerra. El cuello de botella, provocado por la pandemia, en la distribución a nivel internacional también ha desempeñado un papel fundamental en todo lo que esta sucediendo.
La preocupación en la población por los altos costes es generalizada y la pregunta de cuándo se producirá la bajada de la inflación se repite constantemente. Además el clima es de una cierta inquietud ante la duda de saber cuándo será posible ahorrar a la hora de hacer la compra. Según afirman dichos expertos, pronto comenzarán a caer los precios ya que los costes de producción de productos similares a los productos alimenticios han disminuido. Además el coste de los transportes también ha descendido además del de su mantenimiento.
La subida de los precios de algunos productos hace que no todos los productos recuperen su nivel de precios normal de inmediato ya que la dinámica deflacionista supone el rápido ascenso pero su regreso se produce más lentamente. Algunos productos o servicios dependen de la competencia que tengan en el mercado y en particular los servicios cuando suben es muy complicado que bajen, es decir, son precios permanecen quietos tras haber subido.
Un concepto destacable que puede definir la dinámica de la economía es la histéresis que se produce cuando las consecuencias que provocan cambios, en este caso la subida de precios, permanecen aún incluso cuando la situación ha cambiado. Una solución a este problema es el aumento de los salarios aunque se debe aplicar de forma correcta y estudiando muy bien las consecuencias ya que podría avivar mucho más el problema. En definitiva, las subidas deberían ser graduales asumiendo que durante un período de tiempo nuestro nivel económico será inferior aunque con la tranquilidad de que se va a recuperar lo perdido.
Comentarios
Publicar un comentario